Luis Pardo molina

Cierto es, si siempre disfrutamos del deporte de la bicicleta, cuando se hace acompañado de buenos amigos, con buena sintonía y buen ambiente, mucho más. Al menos hoy yo he disfrutado de lo lindo, por la etapa, por los parajes por los que hemos pasado, por ver como está el campo, y por la compañía de mis buenos amigos Luis, Gabi y Jesus. La temperatura nos acompañó desde el principio, no hacía frío y era un día perfecto para pedalear, el único pero es que Alex no nos pudo acompañar, supongo que tendría alguna excusa de "peso", ya se sabe. Nos fuimos derechos al Puente de Hierro, para atravesar El Peralbillo y plantarnos en el pantano de Gasset, para desde allí y siguiendo el canal del embalse, llegar hasta el inigualable paraje del Molino Carrillo, a las afueras de Malagon. Increible toda la ruta y este sitio en particular, por que realmente el rio es vida y allí corre el agua muy limpia. Desde allí vuelta para Ciudad Real, a buena marcha, por que Gabi se empeñó ...

Bea, este chico necesita ya una bici nueva, que si los "bolillos" del pedal, que si los rodamientos del eje, que si el sillin se me afloja, jajajaja, el caso es que terminó la etapa inventando cualquier nueva excusa para hacernos aflojar la marcha, pero también hay que recalcar que con la "máquina" dándole continuos problemas era más dificil seguir el ritmo endiablado que desde el primer momento se puso, rumbo a Ballesteros.   Era un dia aparentemente de agua, por que según las predicciones daban algo de lluvia, que luego no fué tal, posteriormente continuó Gavi, contándonos sus "peripecias" con la pecera la noche anterior  (este Gavi es la leche, es la alegria del equipo) y terminamos cruzando el Jabalón hasta dos veces, una de ellas casi a ciegas, ya que el puente que lo cruza ha sido literalmente engullido por el rio Optamos por dirigirnos hacia Ballesteros de Calatrava, por el camino que va hasta Ciruela, ya que tratábamos de evitar el pos...

La mañana no era apacible, entre la lluvia y el viento del norte, este que empieza a visitarnos, la cosa no pintaba bien, pero aún así, nos decidimos por tirar dirección Alcolea, y terminamos subiendo al repetidor de TV, no sin antes haber coronado otras tres subidas más, como son: La Ermita de Alarcos, El Cerro hacia Valverde y el camino a La Posadilla. A pesar del mal tiempo, es una alegría salir al campo en un día así y ver como corre el agua, inundando caminos, como van los arroyos, como se ha puesto el campo en cuatro días de lluvia de la buena, todo un "espectáculo". Estos chicos son unos fenómenos, vamos devorando kmts, y entre comentarios, fotos de Luis y risas, casi ni nos enteramos de las subidas, y como al final parece que se quedaron con "hambre de pedales", terminamos subiendo la Ermita San Isidro de Poblete, para, desde allí, y de manera tranquila  dirigirnos al lugar de siempre, a ese lugar donde las cañas están más fresquitas...